#84 Exposición prenatal a medicamentos anticonvulsivantes y trastorno de atención e hiperactividad

Hola todos!

Hoy revisamos un tema relacionado con la salud fetal al que ocasionalmente podemos ver en la consulta: bebés expuestos a medicamentos para el tratamiento de la epilepsia y las asociaciones con algunos trastornos del desarrollo. Hoy específicamente buscaremos la asociación con trastorno de atención e hiperactividad (TDAH), uno de los problemas más frecuentes que vemos en la consulta de neuropediatría.

El primer trabajo que comentamos pertenece a Christensen (Jama Network Open, 2019), es un estudio de cohortes de más de 913000 pacientes de Dinamarca durante un periodo de 9 años en promedio, con datos tomados de su registro nacional de prescripciones. Se identificaron 580 pacientes con exposición prenatal a ácido valproico, de los cuales 49 (8.4%) tuvieron diagnóstico posterior de TDAH. En comparación, en la población restante de pacientes no expuestos a ácido valproico, la prevalencia de TDAH fue de 4.6%. El estudio no encontró asociación entre la exposición a otros fármacos anticonvulsivantes diferentes a valproato y TDAH. El riesgo de desarrollar TDAH en los 15 años posterior a la exposición fetal a ácido valproico se calculó en 11%.

El segundo trabajo es una revisión sistemática publicada por Vaccaro (J Popul The Clin Pharmacol, 2020) que explora publicaciones sobre el tema desde 1988. Seleccionaron 8 estudios, la mayoría de cohortes (donde se incluye el trabajo de Christensen que comentamos al inicio), que evaluaron la relación de otros medicamentos y/o la politerapia con el riesgo de TDAH. La revisión final incluyó más de 800000 bebés y descartó la asociación de TDAH y el uso prenatal de lamotrigina. La evidencia encontrada no fue suficiente para afirmar que exista una relación entre la politerapia para epilepsia y el riesgo de trastorno de atención.

La información disponible sugiere que la asociación con TDAH queda limitada a la exposición fetal a ácido valproico y no a otras drogas.. Estas asociaciones deben ser conocidas por quienes atendemos a las madres o a los bebés expuestos, para poder informar a los padres de manera más completa acerca de los riesgos que sus niños pueden afrontar.

Puedes revisar el artículo de Christensen aquí:

https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC6324310/

Puedes leer la revisión de Vaccaro en el siguiente link:

https://jptcp.com/index.php/jptcp/article/view/722/728